País.
El dato se desprende del primer “Informe anual sobre la situación de los jóvenes en el sistema de riesgos del trabajo 2017”, que elaboró la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT). El estudio refleja, además, que los jóvenes manifiestan un comportamiento estacional con picos de cobertura en los meses estivales.
En los varones, el índice de incidencia de los jóvenes es un 45% más elevado que el de los trabajadores de 25 años y más (70,0 y 48,2), mientras que en el caso de las mujeres jóvenes el índice es 11% mayor respecto a las de 25 años o más.
Si se toma en cuenta la mortalidad por accidentabilidad laboral o enfermedades profesionales puede observarse un contraste interesante: mientras que las mujeres jóvenes tienen un índice de mortalidad 3 veces superior al registrado en las de 25 o más años, en el caso de los varones este índice es siempre inferior al registrado en los adultos (57,3 y 66,2).
El estudio se elaboró el marco de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenido, que incluye a la juventud como parte integral de las acciones para reducir las desigualdades y erradicar la pobreza. Tiene en cuenta las advertencias y sugerencias realizadas por la OIT y por la Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA) que identifican a los jóvenes como un grupo de riesgo desde el punto de vista de la seguridad en el trabajo. Al respecto, señalan que padecen lesiones y enfermedades laborales en muchísima mayor medida que sus pares adultos.
El informe de la SRT detalla que, en el año 2017, la población de 16 a 24 años cubierta por sistema de riesgos del trabajo- trabajadores registrados en zonas urbanas y rurales de todo el país- fue de 870.028 jóvenes, compuesta en un 34% por mujeres y por 66% de varones.
El 84% de las mujeres de 16 a 24 años se encuentra ocupada en: servicios comunales, sociales y personales (38,3%); comercio, restaurantes y hoteles (33,1%); y finanzas, seguros, inmuebles y servicios a empresas (12,7%). El salario bruto promedio es de $13.117, equivalente al 45% del salario bruto promedio del grupo de 25 años y más.
Por último, los varones tienen una distribución más heterogénea en el mercado laboral y varía la preponderancia de las actividades económicas de acuerdo a los grupos de edad. El 74% de los varones de 16 a 24 años se concentran en: servicios comunales, sociales y personales (23,9%); comercio, restaurantes y hoteles (22,1%); industrias manufactureras (16,7%); y construcción (11,2%); y perciben un salario bruto promedio de $14.512, que equivale a la mitad del salario bruto promedio de los trabajadores de 25 años y más.