En medio de una fenomenal caída en el poder adquisitivo de los ingresos de trabajadores y trabajadoras en Argentina, que sufrieron el impacto de una inflación acumulada superior al 90 por ciento desde la asunción de Milei, más de la mitad de las empresas del sector textil implementó suspensiones o despidos ante el fortísimo retroceso en las ventas.
También admitieron haber tenido que tomar otras medidas que afectaron el empleo, como la reducción de horas extras y la rescisión de contratos.
Así lo reveló una encuesta que lleva adelante la Fundación ProTejer, en la que además se destaca que el 96 por ciento de las encuestadas identificaron como principal razón de la caída en las ventas, al hundimiento del poder adquisitivo.
Además, la encuesta revela que el 87% de las empresas de la industria textil experimentaron una caída en las ventas en el primer bimestre de año, mientras que el 68% experimentó una menor producción.
Para casi la mitad de las firmas del sector, el hundimiento en las ventas en el mercado interno osciló entre el 21 y el 40%.
Por su parte, las que apreciaron una retracción en la producción tuvieron una baja promedio equivalente al 35% respecto al primer bimestre del año pasado; aunque una de cada tres aseguró haber sufrido un declive superior al 41%.
A su ves, 7 de cada 10 empresas del sector mostraron una caída del uso de su capacidad instalada en enero y febrero con relación al mismo período del año anterior, con una baja promedio del 26%.