Colonia Caroya.
Tiene 8 años y su mamá, Marina, nos contó lo difícil que es sostener todos los cuidados especiales que requiere alguien que padece albinismo. La piel y la visión reducida son dos de las cuestiones que requieren atención. Las obras sociales no cubren los costos y es por eso que están luchando por una Ley que los reconozca.
Marina, la mamá de “Benja” contó lo que padece su hijo, que tiene albinismo.
En la actualidad un enorme grupo de albinos de todo el país están intentando que se apruebe una Ley que obligue a las obras sociales a cubrir algunos tratamientos, ya que se con costosos y el albinismo no es tenido en cuenta como una enfermedad.
“Es mi único hijo y no ha sido fácil porque no es conocido el albinismo, pero gracias a Dios he conocido gente donde he recibido mucha ayuda”, relató Marina.
Los problemas de visión y los tratamientos y cuidados constantes en la piel son lo más costoso, ya que no se pueden exponer al sol.
Los diputados Brenda Austin (UCR) y Daniel Paserini (UpC) fueron los legisladores que presentaron el proyecto de Ley que aún sigue durmiendo en la Cámara Baja.