Córdoba.
El Gobierno nacional anunció anteayer la adjudicación a seis consorcios empresariales de la primera etapa de la llamada participación público privada (PPP) para la transformación de más de 3.300 kilómetros de rutas nacionales, con una inversión total de ocho mil millones de dólares.
Uno de los corredores que incluye a Córdoba es el “F”, con importantes obras en la ruta nacional 9 norte.
La intervención más relevante en ese corredor (además de la reparación de la autopista a Rosario) es la construcción de una autopista nueva hacia el norte del país, desde la capital cordobesa.
Esa obra, en los pliegos originales dados a conocer en abril pasado por el Ministerio de Transporte de la Nación durante la licitación, abarcaba 77 kilómetros entre Estación Juárez Celman y Villa del Totoral.
Allí se incluía una traza nueva que iba a evitar –por el oeste– a la ciudad de Jesús María.
Sin embargo, en la adjudicación de esta semana, se conoció que la obra que se hará ahora tendrá una distancia menor: serán 28 kilómetros entre el cruce del río Carnero y la bifurcación de la ruta 60 (hacia Deán Funes).
La obra licitada será una autopista, con todos los cruces viales y fluviales. Incluirá una variante que evitará Jesús María y luego continuará por la misma traza que hoy tiene la ruta 9, hacia el norte.
Desde el cruce con la ruta 60, se realizarán mejoras en la calzada en los 9 kilómetros restantes hasta Villa de Totoral.
Desde la cartera que conduce Guillermo Dietrich confirmaron ayer que la obra propiamente dicha de la autopista comenzará en dos años, pero, mientras tanto, el consorcio que ganó la licitación “tiene que hacer por contrato los arreglos que sean necesarios para que la ruta esté en excelente estado”. “Se harán las obras de rehabilitación y mejoras antes de que comience la autopista”, agregaron.

Las demoras en empezar tienen relación con las expropiaciones que hay que materializar para tener espacio para hacer los nudos previstos. “No se tienen que comenzar desde cero las licitaciones; ya se han hecho algunas evaluaciones”, aclararon las fuentes.
La Voz no pudo confirmar si el proyecto original fue desechado o solamente pospuesto. Según la memoria descriptiva de la obra difundida por la Nación en abril, la traza iba a “nacer” en la variante Juárez Celman y recorrer 49 kilómetros hasta unirse con la ruta 9, luego de Sinsacate.
El corredor F fue adjudicado al consorcio integrado por las compañías Helport, Panedile, Eleprint y Copasa.
La nueva autopista estará lista en 2022
Los contratos se firman en julio, y en octubre comenzará las obras en algunos de los corredores. Los 28 km de autopista sobre ruta 9 norte largarán en dos años. Cuando esté lista, habrá un peaje en Sinsacate.
Fuente: La Voz del Interior