La noticia llamó la atención de propios y extraños el fin de semana. Por restricciones preventivas un casamiento que se iba a realizar en Jesús María fue suspendido el sábado a la tarde. Sin embargo, otro que estaba organizado en las afueras de la ciudad, sí se concretó.
Ambos fueron notificados y en el primer caso se suspendió tempranamente, no pasó lo mismo con el segundo, dado que los organizadores hicieron caso omiso a la orden. La particularidad es que uno de los involucrados era familiar del Intendente Luis Picat, quien estaba invitado a la fiesta, pero no asistió. “Lo de los casamientos fue una situación odiosa y antipática. Yo la pasé mal respecto a mis familiares, porque no acataron la orden y tuve que mandar la GUM y la policía”, aseguró.
Al tiempo que agradeció y destacó la actitud que tuvieron quienes sí decidieron suspender, se refirió al ámbito personal: “No tengo diálogo con mis familiares que decidieron hacerlo. Me molesta la actitud que tuvieron”, sentenció.
Escuchá el fragmento de la entrevista en la que se refirió al tema: