Córdoba
La fiscalía a cargo de José Mana imputó este martes a tres empleados administrativos del Sanatorio Aconcagua por el presunto delito de “abandono de persona”, en el marco del proceso que investiga el asesinato de Blas Correas, el joven de 17 muerto por una bala policial hace poco menos de dos semanas.
Vale recordar que, según consta en la investigación y en la descripción de los hechos que se dio a conocer desde un primer momento, los amigos de Blas llegaron con el joven herido de bala a la puerta del sanatorio ubicado en la ciudad de Córdoba y los administrativos del lugar le indicaron que debían llamar al 107.
El argumento utilizado por los trabajadores del centro médico se basaba en que el joven presentaba una herida de bala.
Con la decisión sobre los administrativos del Sanatorio Aconcagua ya suman ocho los imputados en el marco de la causa que investiga el asesinato del joven ocurrido en la madrugada del pasado 6 de agosto.