“Ha costado, pero hemos salido. La recesión ha terminado”, lanzó, convencido, el presidente argentino en la noche de este jueves.
El contexto para que Javier Milei diga que “el país ha empezado a crecer” fue el acto por los cien años de la Cámara de Comercio y Servicios: “Dijimos que íbamos a tener un período de recesión y que después íbamos a subir como pedo de buzo ¿y saben qué? Las burbujas se empiezan a ver”.
No evitó hablar de presuntos golpistas en los medios de comunicación (“No quiero ofender a los monos”) y de “econochantas”, para elogiar su gestión sentenciando que “hay sectores de la sociedad que ya están viendo una mejora… el programa económico funcionó y funciona”.
Luego subió la apuesta: “Estamos bajando la inflación y sin costo; a la luz de haber hecho el ajuste más grande de la humanidad. Mientras critican, hay universidades del mundo que hablan del milagro argentino”.
Valoró que en su Gobierno “echamos 33 mil ñoquis” y le apuntó a trabajadores de Intercargo, también despedidos, y “los hijos de puta de la AFIP”.
En su visión de opuestos del mundo, el mandatario se refirió al periodismo cuestionando que “los editoriales del fin de semana parece que estamos en una guerra” y respondiendo: “No sé si lo hacen por ignorancia o porque realmente le sacamos la pauta”.
No dejó de hablar de su amigo, el empresario Elon Musk, que se mezcló en su discurso: “Esto que está pasando es para entusiasmarse. Ahora se hablará más porque Elon Musk se compró a CNN y vamos a tener una cadena que no sea tan zurdita y con noticias negativas. Van a ver que se habla mejor de (el presidente electo de Estados Unidos, Donald) Trump”.
Por eso, Milei considera que “están dadas las condiciones para que cada argentino pueda cumplir sus sueños”, porque “soplan por todo el mundo vientos de libertad y las fuerzas del cielo nos acompañan con más fuerza”.