Jesús María.
Al menos así lo registran los datos oficiales de la Subsecretaría de Desarrollo Humano. En tanto, si se tiene en cuenta la “Tasa de Fecundidad Adolescente”, la estadística implica la mitad de lo que marcan los números nacionales.
El equipo de la Subsecretaría de Desarrollo Humano, encabezado por el Dr Diego Almada, mostró los números del primer semestre.
En cuanto al embarazo adolescente, la tasa se redujo al 10%, es decir, lejos del 18% que se registraba en 2012, cuando se comenzó a trabajar en la problemática en forma interdisciplinaria.
Significa que sólo una embarazada de cada diez tiene entre 15 y 19 años, el resto corresponde a madres por encima de los 20 años.
Almada señaló que esto tiene que ver con las políticas de contención y seguimiento que vienen aplicando desde Desarrollo Humano, pero también resaltó el trabajo que realizan distintas instituciones de la ciudad, como por ejemplo el Grupo ACES, cuya militancia en cuanto a la sexualidad responsable y la educación sexual integral es harto conocida.
Si uno analiza los datos del primer semestre, de 480 bebés nacidos vivos, sólo 48 corresponden a mujeres menores de 20 años.
Hay en total 1477 mujeres fértiles que están por debajo delos 20 y 48 niños nacidos de vientres de adolescentes. Esto implica una “Tasa de Fecundidad Adolescente” de 32 x mil, es decir, poco más de la mitad (64,9 x mil) de lo que se informó a nivel nacional.
En tanto, la Tasa de Fecundidad General, que abarca a mujeres de entre 20 y 49 años de edad se ubicó en el 53 x mil, cercano al 60 x mil de la nación.
Quiere decir que de cada mil mujeres embarazadas menores de 20 años, sólo 32 quedarán embarazadas.
Almada apuntó que en Jesús María están en marcha distintas estrategias para darles a estas mujeres adolescentes una continuidad de líneas de cuidados.
Las líneas de cuidado en este sentido involucran estrategias que incluyen la consejería en planificación familiar, la detección y control temprano del embarazo, su seguimiento integral, la referencia para el parto, el control durante el puerperio y el acceso a métodos anticonceptivos, control del recién nacido al alta y el seguimiento del control de crecimiento y desarrollo, así como acceso al espacio de estimulación temprana de los niños hasta los 3 años. Para lo cual es necesario la coordinación de los diferentes servicios y sectores involucrados.
“La verdad que el tema del embarazo adolescente es un problema importante y complejo, en particular nosotros priorizamos el problema por allá por el 2012 a través de la Mesa Intersectorial de Salud y el seguimiento de todas las problemáticas de salud y se pusieron en marcha distintos mecanismos para tratar de reducir ese impacto que tenía, en aquel momento logramos medir un 18% del total de las mujeres embarazadas”, precisó el profesional.
Y añadió: “En lo que va del primer semestre del año podemos decir que esto representa el 10%, se ha reducido en más de un 40% esa tendencia de años atrás”.
Almada indicó que cada 10 embarazadas, una es una mujer de entre 15 y 19 años.
El profesional indicó que esto tiene estricta relación con la tasa de fecundidad.