Jesús María.
Así lo aseguró uno de los directivos del Seminario Menor, colegio en el cual una discusión entre padres por un auto mal estacionado derivo en una situación que fue denunciada por el establecimiento. Uno de los papás mostró un arma a las autoridades dando a entender que iba a usarla para resolver el diferendo.
El representante legal del Colegio Seminario Menor, Marcos Fragueiro, dialogó con Más Radio sobre lo ocurrido hace algunos días en la puerta del establecimiento.
Algunos padres discutieron porque uno de ellos había dejado el auto mal estacionado e intentaron moverlo para poder circular. Allí el intercambio de palabras se tornó muy tenso y al día siguiente las autoridades llamaron a los papás que participaron del roce.
Uno de ellos, después de hablar con los directivos, argumentó que seguían molestándolo y se levantó la remera mostrando el arma que llevaba en la cintura por su condición de ser efectivo de Gendarmería.
“La escuela es un recorte de la sociedad, el incidente puede ocurrir en cualquier sector, estuvimos la suerte de estar allí para hablar con los padres, para contener”, afirmó Fragueiro.
Y añadió: “Nos pareció responsable denunciarlo y fue lo que hicimos”.
Fragueiro sostuvo que la escuela también se vio en la obligación de contener a la familia ya que “es la justicia la que tiene que juzgar”.
Admitió que hay preocupación en la comunidad educativa y destacó que el papá que esgrimió el arma está profundamente arrepentido de lo que hizo.
“La misma Gendarmería ha tomado las medidas que tiene que tomar, nosotros no se lo hemos solicitado, pero el padre no va con el arma, se dio cuenta que se equivocó y ya está”, puntualizó el directivo.