Durante la tarde del lunes, en la Comisaría 35 de Córdoba, ubicada en la calle Las Tejas del barrio Zepa, agentes de la Policía provincial salvaron la vida de un bebé de nueve meses que había sufrido un cuadro de asfixia tras tragarse un juguete. La pequeña fue llevada al lugar de urgencia por su madre, de 30 años, quien buscaba desesperadamente ayuda.
La Respuesta Inmediata de los Oficiales
Los efectivos presentes en la comisaría reaccionaron con rapidez y tomaron a la bebé en sus brazos para iniciar de inmediato las maniobras de primeros auxilios. La intervención se realizó con precisión, logrando que la niña expulse el objeto que obstruía sus vías respiratorias en cuestión de segundos.
El Sargento 1º Gonzalo Jalil, de la Comisaría 35, detalló en una entrevista con AM580 de la Universidad Nacional de Córdoba que, gracias a la capacitación en primeros auxilios que recibieron los oficiales, pudieron actuar con rapidez y eficacia en una situación que requería una respuesta inmediata y precisa.
Traslado Urgente al Hospital Infantil Municipal
Una vez que la pequeña logró expulsar el juguete y recuperó la capacidad de respirar, los oficiales procedieron a su traslado urgente al Hospital Infantil Municipal. Allí, el bebé recibió una evaluación más exhaustiva y cuidados adicionales por parte de médicos especializados en pediatría, garantizando así su completa recuperación.
Este incidente subraya la importancia de la capacitación en primeros auxiliares para los oficiales de policía, quienes, gracias a su rápida y efectiva actuación, lograrán evitar una tragedia y salvar la vida de la pequeña.
Reacción de la Comunidad
La comunidad del barrio Zepa ha expresado su gratitud hacia los agentes de la Comisaría 35 por su actuación heroica y por demostrar el valor y la dedicación que caracterizan a la fuerza policial de Córdoba. La madre del bebé, visiblemente emocionada, agradeció a los oficiales por salvar la vida de su hija y destacó la importancia de contar con una policía comprometida y preparada para enfrentar situaciones de emergencia.
El caso pone en aliviar la necesidad de mantener una vigilancia constante sobre los niños pequeños y la importancia de tener personal capacitado para responder en situaciones de emergencia que, como en este caso, pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte.