“La campaña hizo que muchos de los que queremos un cambio nos viéramos enfrentados. Vengo a hacer tabula rasa, barajar y dar de nuevo con el objetivo de terminar con el kirchnerismo. Todos los que queremos un cambio tenemos que trabajar juntos”, dijo Milei, quien de esa manera empezó la campaña para captar los votos de JxC para la segunda vuelta del 19 de noviembre.
Villarruel, se pronunció en el mismo sentido y dijo que “vamos a tender un puente con JxC, con la militancia y con aquellos que quieran cambiar el país. Argentina necesita un cambio”.
“Habrá una colaboración mutua con todos aquellos que quieren construir un nuevo país”, abundó.
Además, el candidato libertario, quien llamó a hacer una “revolución liberal” en noviembre, dio otra señal de búsqueda de sociedad con la alianza PRO-UCR-Coalición Cívica desde su búnker en el Hotel Libertador, en Córdoba 690 de la Capital Federal, y felicitó al candidato al triunfador jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, y al gobernador electo de Entre Ríos, Rogelio Frigerio.
Milei obtuvo 30,08% de los votos del padrón electoral, mientras que en las primarias PASO había conseguido 29,86, imponiéndose entonces por estrecho margen a Juntos por el Cambio y a Unión por la Patria. En las PASO Milei sacó 7.352.244 votos y en estas elecciones generales obtuvo 7.684.236.
Dato no menor es el casi nulo aumento en la provincia de Buenos Aires, donde el candidato libertario esperaba un crecimiento en comparación con las PASO: logró 25,68%, mientras que en las primarias obtuvo 24,52%.
Milei llamó a superar las “diferencias y no mirar para atrás” y aseguró que tiene por delante “una organización criminal que defiende un modelo de beneficiarse a costa nuestra”, en alusión a UxP.
“No podemos permitir que el kirchnerismo nos siga hundiendo la vida”, sentenció.
Por este motivo, consideró que “nunca hubo una elección más clara: todos los que queremos un cambio tenemos que trabajar juntos, podemos ganar y recuperar nuestro país”.
“Si trabajamos juntos podemos terminar con los privilegios de la casta política, no miremos para atrás, pensemos en el futuro”, insistió.
El economista también festejó que gracias a los resultados LLA obtuvo casi 40 bancas en la Cámara de Diputados y 8 en el Senado.
Y aseveró que desde LLA no vienen “a quitar derechos” sino “a terminar con privilegios”.
“Hagamos la revolución liberal, se puede cambiar, existe una Argentina posible si es liberal. Vamos en noviembre por la gloria”, arengó el libertario, y en ese instante comenzó a sonar “Se viene el estallido”, de La Bersuit Vergarabat.
Desde el espacio informaron a Télam que “esperaban un resultado más acotado”, pero dijeron que están conformes “con haber entrado en el balotaje porque era el objetivo desde el principio”.
El clima en el búnker de La Libertad Avanza cambió rotundamente en comparación con las elecciones primarias y sus dirigentes no dejaron de reconocer en “off” que se trató de “una tragedia” los resultados obtenidos en esta primera vuelta.
El eventual jefe de Gabinete de Milei, Guillermo Francos, intentó iniciar cánticos tales como “la casta tiene miedo” dentro del recinto, pero se silenciaron en cuestión de segundos.
Los libertarios cerraron el ingreso al hotel y montaron un escenario que daba a la avenida Córdoba.
La juventud libertaria se congregó en la puerta y tocó una murga que se fue apaciguando con el correr de las horas y la llegada de los resultados, con lo cual el silencio se apoderó de la avenida.
Si bien el candidato no dejó de asegurar que ganarían “en primera vuelta” durante su campaña, la realidad de los resultados golpeó fuerte a su espacio y desde el cierre de los cómputos no se vio a los dirigentes en el piso principal del Hotel Libertador.
Los principales integrantes de LLA que acompañaron a Milei para reconocer la derrota fueron la candidata a vicepresidenta, Victoria Villarruel; la candidata a gobernadora bonaerense, Carolina Píparo; el candidato a jefe de Gobierno porteño, Ramiro Marra; los postulantes a diputados nacionales Oscar Zago, Alberto “Bertie” Benegas Lynch y Lilia Lemoine y a senador nacional Juan Nápoli; el diputado brasileño Eduardo Bolsonaro (hijo del expresidente Jair Bolsonaro) y el dirigente español de Vox Hermann Tertsch.
Eduardo Bolsonaro apareció en el búnker como “observador” electoral y se distinguió por llevar un trabacorbatas con la forma de un arma de fuego.
Milei estuvo alojado en el piso 16 del hotel desde la noche del domingo, junto con su hermana Karina y sin la presencia de su pareja, Fátima Florez.
La Libertad Avanza no mejoró demasiado sus resultados en la Ciudad con respecto a la primarias tampoco, ya que Marra volvió a sacar cerca de un 14% de los votos, mientras que su contraparte de UxP lograba entrar al balotaje.
El candidato porteño no tenía buen semblante cuando se subió al escenario y acompañó a Milei a aceptar el resultado.
Marra dijo a la prensa: “Nosotros estamos en balotaje. Lo importante es que nosotros vamos a ser gobierno y vamos a ganar. Esto es histórico para una fuerza con pocos años”.
Después de dar el discurso, Milei salió a arengar a su militancia en el escenario emplazado en el barrio porteño de Retiro: “¡Viva la libertad carajo”, gritó varias veces.