El crimen cometido hace nueve años finalmente tuvo su condena este miércoles, ya que Juan José Murúa recibió perpetua por el femicidio de Marisol Reartes y su hija en Traslasierra. Escenas cargadas de emoción, dolor y alivio se vivieron en los Tribunales de la ciudad de Villa Dolores en la jornada de ayer cuando al momento del veredicto una sala entera explotó en aplausos, vítores y lagrimas.
En el juicio con jurados populares, por unanimidad fue condenado a prisión perpetua Juan José Murúa (38), acusado de las muertes de Marisol Reartes (18) y de su hija Luz Morena, de dos años, sucedidas en 2014. Cabe destacar que el condenado cumple prisión desde 2018 por otro femicidio, cometido en 2009 en San Luis.
Ambas victimas desaparecieron el 2 de febrero de 2014 en Traslasierra y la investigación permaneció cuatro años sin grandes avances. Recién el 1 de noviembre de 2018 hallaron restos ocios de la mujer de 18 años y eso permitió que la fiscalía trabajara en las hipótesis. El cuerpo de Luz Morena Oliva nunca fue encontrado.
Todo indicó que el criminal mató a golpes a la adolescente y a su niña, para luego arrojarlas al dique La Viña. Si bien se hicieron prospecciones en toda la zona del lago, los cuerpos no fueron encontrados
Eduardo Cúneo, abogado querellante, explicó a medios locales que el hecho de no haber encontrado el cuerpo de la bebé y aún así aplicarse una condena por homicidio “es un precedente en Villa Dolores”.
