Sociedad
Kim y Paolo se conocieron en 2013, pero en 2016 empezaron a salir y se fueron a Milán a trabajar de camareros para aprender el idioma.
Fue Paolo quien encontró en Internet un sitio en el que se podían hacer shows eróticos en vivo y ganar dinero y aceptaron.
Ambos explicaron en Infobae: “Siempre nos gustó filmarnos mientras teníamos sexo. Era y es nuestro fetiche. Hacíamos videos que no le mostrábamos a nadie, que quedaban para nosotros. Pero esa vez encontramos un lugar en el que podíamos hacer lo mismo y ver qué onda. No buscábamos ganar dinero, aunque obviamente nos servía”.
Desde ese momento comenzó su negocio, pero dejaron en claro que todo lo difundido no podía llegar a la Argentina, pero una nota viral hizo que todos en Argentina, incluidos sus padres, se enteraran del nuevo trabajo que habían conseguido.
Kim recordó: “Ese video le llegó a mi papá y a todos sus amigos. Estuvimos un tiempo sin hablarnos, estaba muy enojado y lo entendí. Vengo de una familia en donde el sexo es tabú. No estuvo bueno. Y cuando se enteraron me llamaron y justo estábamos por hacer un show en vivo. Yo vi el mensaje y nos dijeron que podíamos empezar. Tuve que apagar el celular, hacer un show de una hora; y cuando se lo conté a Paolo intenté llamar a mi familia y nadie me quería atender”.
La pareja incursiono en Pornhub, el sitio de pornografía más visitado en el mundo y crearon MySweetApple, un canal en el que son los protagonistas exclusivos de cada escena de sexo, ubicado entre los 100 más vistos de la web, con más de 220 millones de visitas entre sus contenidos.
Actualmente, viven de este trabajo y más de la mitad de lo que ganan, lo ahorran. Y aseguran: “Pensamos otros negocios. Pero ya pasamos por tantas crisis y todo evoluciona. Honestamente este negocio es lo nuestro, nos va bien y vamos a explotarlo hasta lo que podamos”.